viernes, 25 de diciembre de 2020

El pecado de Cluny Brown, de Margery Sharp


Es un libro muy inglés. Es decir, escrito con ironía y sarcasmo; poniendo en evidencia muchas ideas sobre la sociedad inglesa, al menos sobre la sociedad inglesa del tiempo en que fue escrito -años 40-.  Su autora, Margery Sharp (1905-1991) fue una fructífera escritora de novelas, relatos, obras de teatro y libros infantiles -Los rescatadores-; también trabajo como periodista narrando los bombardeos de Londres. Hay varias películas de sus novelas y de sus crónicas periodísticas. 

La historia de Cluny Brown sucede unos años antes del comienzo de la  II Guerra Mundial pero está presente lo que va a suceder -uno de los personajes es un escritor polaco-. También es un buen reflejo del final de una época en el Reino Unido, la época de casas nobles con muchos sirvientes tipo Downton Abbey... Hay una reivindicación de las capacidades de las mujeres, de lo que pueden hacer, de lo que quieren hacer, de no quedar encasilladas en lo que se supone es su lugar, tanto por sexo como por estrato social. 

Es una lectura ligera, si, pero con momentos a destacar. Como ya he dicho, una novela muy inglesa.

"...esta era la única cosa en su vida que Cluny deseaba insistentemente. Todo menos ser ignorada por el destino, aun al precio de recibir un garrotazo. Todo menos el sentirse como el pájaro en la jaula, aunque fuese para protegerse de la tormenta. En pocas palabras; nada de paz, sino torrentes de sensaciones" (pág. 35)

Existe una película de 1946, dirigida por  Ernst Lubitsch -fue la última película que dirigió de forma integra-  y protagonizada por Jennifer Jones y Charles Boyer. Tres de las grandes personalidades cinematográficas de la época. Los dos actores son los que se reproducen en la portada que tenéis en esta entrada. Hay cosas que no cambian, si hay película cercana a la edición hay portada solucionada para el libro...

El libro me llegó en un amigo invisible, en una edición de 1947. Ahora reeditado por Hoja de lata

lunes, 21 de diciembre de 2020

Contar es escuchar, de Ursula K. Le Guin

 

Hace unos días hablaba de La mano izquierda de la oscuridad, una gran obra. En esta ocasión repito escritora pero no género. En esta ocasión es una recopilación de ensayos y conferencias de Ursula K. Le Guin. Como casi todo lo que escribe Le Guin debe leerse con un lápiz en la mano.

Le Guin no defrauda y cada artículo o conferencia recogidos en esta obra nos habla de algún interesante aspecto de la lectura, la escritura, de la imaginación, de lo real, de lo soñado y de la vida. Desde un repaso a una lectura de infancia de la autora hasta una disección de los jurados de premios literarios por género, todos estos aspectos se pueden encontrar en esta selección. 

Es cierto que no se puede mantener el mismo nivel de intensidad o de interés en todos los artículos, pero no dejan por ello de ser sumamente esclarecedores, como en el que disecciona los jurados y los premios literarios en base al género de jueces y galardonados.
En sus artículos se puede aprender sobre cómo se generaron sus novelas o como las ve ella con el paso del tiempo, las escritoras y escritores que le influyeron y por qué, los aspectos de la vida que la interesaban -que eran muchos y variados-, .....

El título original de esta selección, "The wave on the mind" es una frase de Virginia Woolf, autora muy presente en varios de los artículos que se recogen e importante influencia para Le Guin.

martes, 15 de diciembre de 2020

Un cuarto propio, de Virgina Woolf

 Cierto es que la escritura de Virgina Woolf no es la más sencilla del mundo... Es una escritura farragosa, pero desde luego es una lectura necesaria. Todo lo que expone en este ensayo, conferencia que le dice ella, es tan real ahora como cuando se escribió hace casi 100 años. Y era tan real entonces como 200 años antes o más. Es decir, sigue siendo preciso decir alto -y algo más despejado de lo que lo hace Virgina- que las mujeres necesitan independencia económica para poder crear y que necesitan estructuras sociales para ello. 

El libro está brillantemente escrito, lleno de datos y de divagaciones, pero sobre todo está escrito con humor e ironía, a pesar del enfado que la escritora tenía sobre la situación de la mujer en la vida social en general y en la literatura en particular. Todo ello teniendo presente que ella misma pertenecía a una clase social acomodada y con posibles. 

Es un ensayo necesario de leer, si bien hay que hacerlo con la paciencia que Virgina Woolf reclama. 

La edición de horasyHORAS editorial es maravillosa y la traducción de M. Milagros Rivera Garretas es fantástica. 

"...(la mayor gloria de una mujer es que no se hable de ella, dijo Pericles, un hombre del que se hablaba mucho), y decía que en las mujeres la publicidad es detestable. El anonimato corre por sus venas."

"...el tener un cuarto propio, por no decir un cuarto tranquilo o un cuarto a prueba de ruidos, era impensable incluso a principios del siglo XIX, a o ser que su familia de origen fuera excepcionalmente rica o muy noble (...) A ella, el mundo no le dijo como a él: Escribe si quieres, me es indiferente. El mundo le dijo, con una risotada: ¿Escribir? ¿Qué hay de bueno en tu escritura?"

domingo, 13 de diciembre de 2020

Una biblioteca de verano, de Mary Ann Clark Bremer

Este libro me ha dejado una sensación contradictoria. Por un lado me ha gustado la delicadeza de la autora al escribir, su forma sutil de presentar personajes y situaciones, de contarnos unos años de su vida. Sin embargo, me resulta irritante que no me cuente más, que apenas me presente una lista de libros que le acompañaron esos días de su existencia. Me deja con ganas de más, me deja con la sensación de ser un plan para un libro mayor. Eso sí, descubre escritores y libros para ir a la biblioteca con una lista.

Me ha recordado a "Paradero desconocido", de Kressmann Taylor en su brevedad pero no en su potencia. Me ha traído ecos de "84 Charing Cross Road", pero la historia está más desarrollada en las cartas de Hanf.

miércoles, 2 de diciembre de 2020

Conversaciones con amigos, de Sally Rooney

 

Era el libro del club de lectura en inglés. He de reconocer que ha sido fácil de leer, no está mal escrito. Quizás yo me haya perdido cosas, matices, pero no voy a descubrirlo por que no creo que lo vaya a leer en castellano. 

No me han gustado los personajes, su desarrollo; no he conectado con ellos. 

Muestra otras formas de relaciones amorosas, pero no acaba de profundizar en ellas, ni en las motivaciones o sentimientos de los personajes. 

Es mi sensación. Hay gente en el club que ha terminado con mejores impresiones.