sábado, 23 de marzo de 2013

Un leyenda griega en el carro de la compra

Seguro que todas conocemos el mito de Narciso, el bellísimo joven del que todas las doncellas se enamoraban y a las que él rechazaba, una tras otras. Rechazo incluso a la ninfa Eco -cuyo castigo por ofender a Hera fue no poder decir nada más que las últimas sílabas que le dijeran-. Sin embargo el rechazo la llevo a la soledad de una cueva, donde se consumió hasta que sólo quedó su voz. Pero otra diosa, Némesis, hizo pagar a Narciso tal desdén y, a orillas de un río, el joven se enamoró de su propio reflejo de tal forma que no pudo moverse y se convirtió en una planta, cuyas flores parecen estar inclinadas mirándose en algún espejo.
 
Pero la realidad es que son un bulbo y que en el super donde hago la compra de la semana los tenían a buen precio. Se han venido a casa para darle un toque de amarillo primaveral a la decoración.

8 comentarios:

  1. Me gustan por el aire silvestre que tienen!!
    Un abrazo

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  2. me encantan Isthar, aunque mis preferidas son los nardos, que ya empiezan a decaer porque son más de invierno. Saludos y enhorabuena siempre por tu blog.

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  3. A mi casa esta semana ha llegado una gerbera. Muy chulos los narcisos.

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  4. Por ahora me animo con los bulbos, las plantas con flor se me mueren enseguida. No tengo eso que llaman dedo verde.
    Besos

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    1. Me identifico totalmente contigo. Ya me gustaría que mis plantas lucieran hermosas, pero por mucho que lo intente... no hay manera!

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  5. Pues fíjate que no sabía como eran los narcisos, mi desconocimiento sobre el mundo floral no conoce límites :(.

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  6. Estan muy lindos, no los habia visto antes!

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  7. Me gustaron mucho, se ven muy frescas.

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